Siempre me ha encantado el concepto de “Divide y vencerás” porque eso es lo que debes hacer cuando comienzas.
Tiene tareas de ingeniería, tareas de marketing, tareas de clientes y tareas de reclutamiento que deben realizarse. Entonces, ¿Qué haces?
¡Divides y conquistas, por supuesto!
- ¿Está bien que un cofundador no consejero delegado pida financiación?
- ¿Cuál es la actitud que debo tener si siento que mi cofundador está trabajando menos que yo? ¿Cómo puedo motivarlo? ¿Debo parar y comenzar algo más?
- ¿Es mejor elegir un cofundador que sea similar a usted o diferente a usted?
- ¿Un senior de CS sabe lo suficiente como para ser cofundador / CTO técnico de una startup?
- No tengo cofundador. ¿Eso va a ser un problema? En caso afirmativo, ¿cómo consigo uno?
Éramos cinco en nuestro caso cuando comenzamos. Cada uno de nosotros tenía acciones que debían hacerse:
- Jeroen tenía la responsabilidad de construir el equipo de ingeniería y desarrollar nuestros productos iniciales. Y…
- Adolfo tenía la responsabilidad de crear el material de marketing inicial para todos nuestros productos. Y…
- Randy tenía la responsabilidad de desarrollar los programas de prueba para todos nuestros productos. Y…
- Ken tenía la responsabilidad de suscribir representantes y distribuidores para vender nuestros primeros productos. Y…
- ¿Y yo? Bueno, estaba trabajando en reclutar, desarrollar asociaciones, la estrategia del producto (junto con Jeroen y Adolfo) y la estrategia de ir al mercado.
Digamos que hay dos de ustedes. Lo más inteligente es anotar todas las tareas que necesita realizar. Luego, simplemente prioriza la lista y realiza asignaciones entre ustedes dos. Y…
¡No olvide acordar las fechas de vencimiento de cada tarea!
La fórmula de gestión simple de “Quién hará qué, para cuándo” es fundamental para el éxito. Aquí hay algunos trucos para que esta simple idea funcione para usted:
Quien.
Asegúrese de que solo una persona tenga la responsabilidad final de cada tarea. Si tiene un equipo de tres hombres y dos personas tienen la responsabilidad de una tarea, entonces nadie tiene la responsabilidad de la tarea.
Haré qué.
Se específico. No se permite la ambigüedad aquí. Asegúrese de que usted y el cesionario estén completamente de acuerdo sobre cuál es la tarea.
Para cuando
Aquí es donde las cosas pueden romperse.
A nadie le gusta tener que dar una fecha de vencimiento cuando tendrán una tarea específica. Pero debe obtener una fecha específica en la que se harán las cosas.
No puede aceptar, “pronto”. Y no puede aceptar, “la próxima semana”. Debe obtener una fecha específica en la que se realizará la tarea. Nada más lo hará.
Prioriza tus tareas y usa el simple quién hará qué, cuándo la fórmula y estarás en buena forma para ejecutar tu estrategia de divide y vencerás.