Un buen liderazgo es necesario para nosotros, otros y el planeta. Todos tienen que estar a la altura del desafío del liderazgo. Creo que en el centro de una vida útil se encuentra el liderazgo: encontramos sentido en liderar nuestras vidas, en expresar nuestras opiniones, abordar incluso los problemas más pequeños pero más importantes y en ser valiosos y no una carga para los demás.
Por el contrario, la razón del dolor puede ser la falta de liderazgo: sufrimos cuando no somos nosotros mismos, no hablamos, cuando no defendemos nuestros valores y conseguimos ejercer una influencia positiva en nuestros socios, hijos y familias. , amigos, vecinos, colegas, políticas o la sociedad en general.
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Dar un paso adelante y ser un líder es una experiencia extremadamente valiosa para todos. Ejercer liderazgo es como dejar fluir nuestra razón de ser por nuestras venas. Nos ayuda a comprendernos mejor a nosotros mismos y al papel que deseamos desempeñar en el mundo. Nos ayuda a mejorar cada vez más a la altura de nuestros valores y expectativas propias. El liderazgo nos ayuda a vivir nuestras propias vidas, no la vida de los demás.
Liderazgo significa dar. El liderazgo está tomando las decisiones y asumiendo la responsabilidad. Tiene poco que ver con la gloria y la fama, el dinero y el estatus. Pero tanto con dignidad y modestia.
No digo que ser un líder sea fácil. Simplemente rendirse y seguir a la corriente principal es un desafío menor. El liderazgo puede ser agotador, incluso agotador, el liderazgo puede ser incómodo, incluso doloroso. Puede ser difícil defendernos a nosotros mismos y a los demás, y esto ni siquiera en circunstancias extremas, como en una pelea o guerra, sino en la vida cotidiana.
El liderazgo se refleja en las cosas pequeñas. Cuando otros nos necesitan, aunque estamos deprimidos. El liderazgo puede significar que causamos tensiones con los que amamos, dejar una posición bien remunerada o exponernos a altos riesgos. El liderazgo es independencia y objetividad: liberarse tiene un costo. La gente nos llamará equivocados, locos, locos, ignorantes y arrogantes.
Los líderes siguen una brújula moral. Los líderes necesitan coraje, deben ser de mente abierta, reflexivos, positivos y equilibrados en su pensamiento. Necesitan tomar decisiones difíciles: ser conscientes de sí mismos con un alto autocontrol. Cualidades que nos llevan lejos, que nos ayudan a tener éxito en la vida, personal y profesionalmente.
El liderazgo no es un rol. El liderazgo es una mentalidad y actitud, un comportamiento, una forma de pensar, actuar y vivir, que puede producir resultados sobresalientes y carreras increíbles. Lo más importante, ser un líder puede hacernos grandes personas, sin embargo, dependientes de nuestros valores y nuestra capacidad de vivir de acuerdo con ellos.