¿Cuál será el resultado del movimiento de derrame de liderazgo del Partido Liberal Australiano del 10 de febrero de 2015?

Es difícil porque quién sabe qué pasa por las mentes del Partido Liberal. Hay muchos factores a tener en cuenta, entre ellos su negativa sobre por qué el público no les gusta. Si hay un derrame o no depende de si los parlamentarios individuales y los senadores reconocen y sopesan esos factores de manera objetiva.

Uno de los factores principales es que cuando estaban en la oposición, hicieron un gran problema con el cambio de líderes del gobierno a mitad de período … dos veces. Para ellos, hacer lo mismo en su primer período de gobierno, con razón, se abrirían al ridículo. Pero continuar con su líder actual es venenoso para sus posibilidades de reelección de todos modos. Es un escenario de perder-perder, pero cambiar de líder todavía les da una oportunidad, incluso si tienen que tragarse su orgullo para hacerlo.

No estoy seguro de que puedan tragarse su orgullo lo suficiente como para llamar a un derrame. Espero que sí, para que podamos obtener un primer ministro que no sea una vergüenza nacional, pero no soy optimista al respecto. Y si llaman un derrame, no soy optimista acerca de que designen a alguien un poco más en el medio del camino (Turnbull), es probable que se queden con alguien que solo es un Abbott (Bishop) mejor hablado.